Araña del año 2019
Araña-hormiga saltadora europea – Myrmarachne formicaria (De Geer, 1778)
La araña-hormiga saltadora europea Myrmarachne formicaria (De Geer, 1778) pertenece a la familia Salticidae. Esta familia engloba 6.089 especies en el mundo, 345 de las cuales se pueden encontrar en Europa. El género Myrmarachne está representado por tres especies en Europa, donde solo esta especie se extiende más allá del ámbito Mediterráneo: desde Europa Occidental hasta Escandinavia.
Myrmarachne formicaria se distribuye a lo largo del Paleártico, por lo que en Europa está presente de manera natural, pero también se introdujo en EE.UU. Se puede encontrar tanto en zonas llanas como montuosas, hasta los 800 m sobre el nivel del mar (como se ha constatado en Alemania y Austria), donde se ve favorecida especialmente en las zonas más cálidas. En ciertos lugares puede aparecer con bastante frecuencia y en general no se la considera amenazada.
Al contrario que muchas otras arañas saltadoras, que tienen cuerpos compactos (e.g. el alguacilillo o araña cebra Salticus scenicus), Myrmarachne formicaria tiene un cuerpo alargado y delicado de alrededor de 5 a 6,5 mm de longitud, que recuerda al de una hormiga. La coloración básica del prosoma es naranja-pardo con únicamente el área cefálica destacada en oscuro.
El abdomen oval y alargado es de amarillo a naranja-pardo, con coloración negra en el último tercio. El abdomen se conecta con el prosoma por una cintura estrecha, similar al pedicelo de una hormiga. Las patas son de color amarillo a naranja con marcas negras y franjas longitudinales a los lados. El primer par de patas está recorrido por una franja y tiene metatarsos muy oscuros y suavemente engrosados que recuerdan a las antenas de una hormiga. Incluso los pares de ojos posteriores son bastante grandes, y ¡similares en tamaño y posición a los ojos de una hormiga!
Las hembras presentan un normal desarrollo de las partes bucales, pero las de los machos se extienden más o menos horizontalmente hacia adelante y son aplanadas y alargadas. De este modo, pueden distinguirse fácilmente ambos sexos. Durante el apareamiento, los machos se anuncian a sí mismos ante las hembras con sus enormes quelíceros. Al mismo tiempo, estas partes bucales son también empleadas en luchas rituales en las que dos machos se mantienen opuestos uno al otro y amenazan a su rival con sus quelíceros totalmente abiertos.
Como todas las arañas saltadoras, esta araña mimética no construye una tela para capturar comida, sino que espera o acecha a sus presas. La araña vive sobre todo en el suelo, o en la hojarasca (i.e. hábitat epigeo), normalmente cerca de las hormigas que imita como Myrmica rubra o especies de Formica. Las arañas se localizan en varios hábitats, normalmente prados secos o huertas cálidas, pero también puede encontrarse en lugares encharcados o húmedos como prados húmedos o bancos de juncos.
Las arañas-hormiga saltadoras europeas pueden encontrarse a lo largo de todo el año con su período de mayor actividad de abril a agosto. Les gusta invernar en conchas vacías de caracoles terrestres.
La especie es una araña mimética con las hormigas o mirmecomorfa, es decir, imita su apariencia y movimiento, pero no para alimentarse de ellas. Por el contrario, caza pequeñas moscas y quironómidos, y también plagas vegetales como áfidos (pulgones). Estas arañas se benefician del hecho de que las hormigas tienen relativamente pocos enemigos, dada su agresividad. De ese modo, las arañas sufren los ataques de avispas cavadoras, icneumónidas y pájaros, menos frecuentemente que sus congéneres. Las arañas-hormiga saltadoras son así un verdadero ejemplo de mimetismo de protección (batesiano). No hay que olvidar que no son las únicas mirmecomorfas, pues al menos en el área mediterránea europea, en no pocos insectos, y en varias familias de arañas se produce este fenómeno: el género Micaria de las Gnaphosidae, la familia Phrurolithidae, el género Zodarion de las Zodariidae y un solo género de Theridiidae. Además, algunos machos de Linyphiidae guardan cierto parecido, como en Microlinyphia.
Las arañas-hormiga saltadoras también imitan los movimientos de las hormigas: en primer lugar en su modo de andar. En vez de del estilo abrupto “típico” de las arañas saltadoras, podrán verse unos movimientos de hormiga con fases de carrera corta y ondulante, como si fuese una hormiga siguiendo un rastro de feromonas. En segundo lugar, la araña generalmente utiliza solo tres de sus pares de patas para caminar, sosteniendo el primer par en el aire, asemejándose a las antenas de una hormiga. Gracias a movimientos específicos de las patas anteriores, consigue sabiamente ocultar sus enormes ojos medios con forma de foco.
En Europa Occidental hay otros dos géneros de arañas saltadoras que se parecen a hormigas: Synageles y Leptorchestes. La araña hormiga Synageles venator es claramente menor en tamaño, tiene tan solo de 3 a 4 mm de largo y es de las más grandes de las cuatro especies de Synageles presentes en la Península Ibérica (S. albotrimaculatus no llega a los 2 mm). Sin embargo, al menos las hembras de las 3 especies de Leptorchestes presentes en la Península son de tamaño similar a la araña-hormiga saltadora, pero no presentan el área ocular elevada en comparación al resto del prosoma (L. berolinensis, L. peresi y L. mutilloides).
¿Por qué se eligió la araña-hormiga saltadora como Araña Europea del Año? La razón principal es, por supuesto, su mimetismo con las hormigas, que no solamente afecta a su forma corporal, sino también copia los patrones de desplazamiento y comportamiento. Es una asombrosa manera de evitar la depredación para esta araña saltadora.
Mediante la elección de la Araña Europea del Año, no solamente queremos resaltar un grupo menos popular de animales, sino también esperamos que los científicos puedan aportar datos sobre su distribución actual. En este sentido, disfruta la Araña del Año y ayúdanos con información de tu localidad o una foto para documentar esta especie. Será también de interés que incluyas información o fotografías de las hormigas que conviven con ella.
La Araña Europea del Año se escoge por 83 aracnólogos de 26 países europeos. La coordinación de la votación se lleva a cabo por el Museo de Historia Natural de Viena, junto a la sociedad “Arachnologische Gesellschaft” (AraGes) y la Sociedad Europea de Aracnología (ESA).
Christoph Hörweg & Pablo Carballo